Un gran cambio le sucedió a su alma
Cuando Paws for Hope recibió una llamada de algunos transeúntes sobre un perro indefenso, corrieron a la escena. Lo que descubrieron allí derritió sus corazones.
El pobre animal estuvo encadenado durante más de 12 años después de que sus dueños se mudaran y dejaran a su mascota con una persona sin corazón que no solo no se preocupaba por él, sino que además lo mantenía encadenado, sucio y hambriento.
Roger, el perrito, tuvo muchas dificultades en su vida, pero por suerte obtuvo su merecido y su vida cambió por completo.
Se le brindó no solo tratamiento y atención médica, sino también mucho amor y atención. Ahora es el perrito más feliz del mundo, porque está rodeado de gente cariñosa y cariñosa.